Mi amigo G

Hace una hora que me mandó un mensaje en el que me decía que había tenido un accidente de moto, que no estaba grave pero que estaba en el hospital.

Lo llamé inmediatamente. Tiene seis costillas rotas y la muñeca. Casi no puede hablar porque le duele todo al respirar, por lo que lo llamaré varias veces para que no se canse hablando de una sola vez.



Mi amigo "G" es alguien al que haga lo que haga, diga lo que diga, pase lo que pase, siempre lo querré. Somos amigos desde niños, y con el tiempo nos hemos unido cada día más, aunque nos veamos cada día menos. Es curioso, pero es así. Ambos sabemos nuestros secretos más íntimos. Nos hemos contado cosas importantes, cosas duras, cosas absurdas, cosas divertidas, cosas y más cosas, detalles y más detalles. Hemos hablado horas, horas y más horas sobre nosotros. Sí, nos guardamos nuestros secretos y somos felices haciéndolo.



Siempre me dice que le sorprende lo fácil que es contarme "todo", sin que luego yo lo juzgue. ¿Se puede juzgar a alguien al que quieres por sus decisiones en la vida? No, hay que dejarlo libre y quererlo. A veces se ha equivocado pensando que lo que siente hacia mí es un amor diferente y ha creído estar enamorado de mí. Creo que hace tiempo que ya lo tiene claro.



"Me siento feliz cuando te veo y me abrazas, cuando hablamos cogidos de la mano, cuando me besas y se para el tiempo porque me siento en el mejor de los refugios.


Siempre que pienso en ti, sonrío.


Te quiero y estoy orgullosa de ti, G."